Para el año 2035, el Corregimiento El Manzanillo será un territorio planificado, productivo, con armonía en su ordenamiento territorial, ambiental y social; con una población socialmente responsable, equitativa, incluyente, segura, con administración de justicia, gobernanza, ambientalmente sostenible, mediante el diálogo permanente entre la comunidad, el sector privado, la sociedad civil organizada, la academia y el Estado.

Estos actores trabajarán mancomunadamente en el desarrollo desconcentrado de políticas, planes, programas y proyectos que propendan por disminuir la brecha de inequidad entre el territorio rural y el urbano, articulándose a las dinámicas de los diferentes niveles de gobierno, para mejorar su infraestructura, capacidad institucional, control territorial e índices de calidad de vida de sus habitantes, teniendo en cuenta el interés general y Derechos Colectivos.

Transformar y planificar integralmente el desarrollo territorial, ambiental, social y económico mediante la gestión, formulación, diseño, ejecución de planes, programas y proyectos sociales, ambientales y físico-espaciales, que cierran las brechas sociales y el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes del Corregimiento en Manzanillo.

El objetivo principal del Plan de Desarrollo Corregimental es establecer un instrumento técnico de planificación que permita mejorar las condiciones sociales, económicas y ambientales, teniendo como base las necesidades del conjunto de la población mediante la concertación con los actores sociales del territorio, para que sean sujetos de su propio desarrollo y que, a su vez, permita convertirse en política de gobierno, respondiendo efectivamente a las aspiraciones de la comunidad rural.

Para dar cumplimiento a la Visión y Misión del Plan de Desarrollo Corregimental es esencial:

1. Promover la gobernanza territorial en el ámbito rural favoreciendo el desarrollo del corregimiento.
2. Permitir la participación de los actores sociales y la comunidad en la definición de alternativas de solución para las problemáticas y necesidades.
3. Priorizar las necesidades, problemáticas y oportunidades identificadas para las veredas en el corto, mediano y largo plazo.
4. Estructurar los proyectos mediante la formulación participativa para la atención de las necesidades, problemáticas y oportunidades identificadas.
5. Mejorar las condiciones de uso y apropiación, conservación y sostenibilidad del corregimiento, con la aplicación de instrumentos de gestión para el desarrollo territorial y ambiental.
6. Impulsar un corregimiento planificado, ordenado y competitivo.
7. Planificar la dotación de infraestructuras para la prestación de los servicios públicos y la oferta de equipamiento y espacio público.
8. Propender a la protección de ambientes naturales y su desarrollo sostenible para mejorar la calidad de vida.
9. Construir un sistema de información cartográfico para facilitar la interpretación y comprensión del territorio favoreciendo el proceso de toma de decisiones.
10. Desarrollar el agro ecoturismo en el corregimiento, potenciando las prácticas agropecuarias propias y brindando servicios relacionados con el potencial cultural, arqueológico y ambiental.
11. Generar infraestructura para la conectividad vial y peatonal, en sincronía con las centralidades rurales emergentes existentes en el área corregimental.
12. Fortalecer la riqueza patrimonial del corregimiento con proyectos que velen por su protección y cuidado.
13. Establecer una política habitacional participativa e incluyente mediante proyectos que ayuden a disminuir el déficit cualitativo y cuantitativo de vivienda, priorizando propuestas enfocadas a la relocalización de los hogares ubicados en las áreas con condición de riesgo para ser desarrolladas en el horizonte del corto plazo.

Consolidar las centralidades rurales emergentes mediante la proyección de infraestructura que promueva la accesibilidad, equipamientos, espacio público y servicios públicos que propicien la dotación de bienes y servicios para la comunidad.

• Derecho a la participación: el Plan de Desarrollo es una herramienta efectiva para promover y materializar la planeación participativa en el Corregimiento. En su proceso de construcción se logó la participación activa de la comunidad representada en la voz de sus líderes sociales. De igual forma, su implementación motivará a las comunidades a hacer parte de los procesos e intervenir en la toma de decisiones para la priorización de proyectos y gestión de recursos para sus territorios. Este será el instrumento de gestión comunitaria por excelencia para la movilización de voluntades y gestión de programas, proyectos y recursos para el mejoramiento de la calidad de vida durante los próximos 12 años.

• Enfoque territorial: este Plan favorecerá la intervención de la ciudadanía en la construcción de lo público y colectivo en el Corregimiento, pues será la comunidad, representada en el CIPT y las organizaciones civiles, quien estimule la inversión pública y las intervenciones estratégicas en su territorio, a través de la gestión activa de los programas e ideas de proyectos aquí planteados.

• Objetividad: este Plan de Desarrollo Corregimental, se articula a los instrumentos del Sistema Municipal de Planeación y fue construido por la misma comunidad, con fundamento en un profundo conocimiento de las fortalezas y necesidades del territorio y sus moradores. Por tanto, las alternativas de solución que aquí se consolidan son objetivas y correspondientes con las realidades territoriales.

• Corresponsabilidad: la gobernanza solo es posible cuando hay un adecuado equilibrio en la articulación y comunicación entre los diferentes actores involucrados en un territorio (CIPT – Alcaldía – Organizaciones Civiles), lo que permite mejorar el control y la transparencia en la gestión pública. Por ello, cuando la comunidad interviene en las decisiones que se toman respecto a la inversión de recursos y desarrollo de proyectos en sus territorios, se puede construir una visión común, con la cual se comprometen todos los actores.